Los
cristianos estamos convencidos de que no podemos vivir sin Eucaristía. Es
esencial para el adulto permanecer unido a Cristo (Jn 15, 1-8), sólo de esta
manera podrá dar frutos de vida eterna. La vida eucarística cumple con las
palabras del Evangelio y nos invita a la misión con los dones que hemos
recibido en la misma celebración. Así lo recuerda el Documento de Aparecida: “Para formar al discípulo
y sostener al misionero en su gran tarea, la Iglesia les ofrece, además del Pan
de la Palabra, el Pan de la Eucaristía. A este respecto nos inspira e ilumina
la página del Evangelio sobre los discípulos de Emaús.
Cuando éstos se sientan
a la mesa y reciben de Jesucristo el pan bendecido y partido, se les abren los
ojos, descubren el rostro del Resucitado, sienten en su corazón que es verdad
todo lo que Él ha dicho y hecho, y que ya ha iniciado la redención del mundo.
Cada domingo y cada Eucaristía es un encuentro personal con Cristo. Al escuchar
la palabra divina, el corazón arde porque es Él quien la explica y proclama. Cuando
en la Eucaristía se parte el pan, es a Él
quien se recibe personalmente. La Eucaristía es el alimento
indispensable para la vida del discípulo y misionero de Cristo” (Discurso inaugural No. 4).
La Eucaristía
dominical es un momento privilegiado. El domingo como Día del Señor, día de la
Iglesia y día del hombre, tendrá que ser revalorizado por los adultos
cristianos como el día central de la semana. No solamente como el “fin de
semana” sino como el día en que nos acordamos más de Dios y de los hermanos,
sobre todo de los más necesitados.
La catequesis ha de incluir una fuerte invitación
a celebrar cada domingo la Eucaristía, especialmente en familia, expresando así
su acción de gracias al Padre por todos
los beneficios salvíficos que nos ha regalado, y el ofrecimiento a Dios de la
propia vida, ya que
"Eucaristía" significa, ante todo, acción de gracias. Ha de
incluir también una invitación a transformar la propia vida y la sociedad, con
una vida eucarística.
(Cfr JESÚS, CAMINO VERDAD Y VIDA. Líneas Generales para la catequesis
con adultos, No. 2.5 Ed. Casa del Catequista)
No hay comentarios:
Publicar un comentario